2274 . Alguien te persigue. Robas la máquina del tiempo. Vas a convertirte en el mejor científico de la historia. Viajas.
2042. Mientras da cátedra el físico Douglas Wells, entras al auditorio y corriges la Ecuación Wells. Gracias a ello, ahora es teóricamente correcto el viaje en el tiempo. Tu perseguidor casi te alcanza, pero logras escapar.
2010. En Suiza, les explicas a todos exactamente qué va a pasar en cuanto enciendan el Gran Colisionador de Hadrones. No te creen. Apuestas y te dejan encenderlo a ti. Todos aplauden. Y te pagan.
1985. Asistes al Congreso de Viajeros del Tiempo. Hay muchos doctores; algunos tienen apellido, otros solo un número, pero al parecer pocos tienen nombre. Tu perseguidor se distrae saludando a todos los presentes. Viajas.
1927. En Bruselas, conversas con Albert Einstein. Hablan de relatividad, espacio y tiempo. Le haces ver que estaba correcto y equivocado al mismo tiempo. Te encuentras con Erwin y le regalas un gato. Pobre gato.
1850. Te encuentras a un joven Jules Verne, quien no está seguro si debe ser abogado o dedicarse a escribir. Lo abrazas, le agradeces y le pides que continúe escribiendo. Jules sonríe.
1666. Intentas arrojarle una manzana a Newton, pero fallas. De todos modos la ve caer, y comienza a hacer gestos contemplativos. Tu trabajo está hecho.
-230. Le explicas a Arquímides cómo funciona la palanca. En broma, le comentas que podría mover el planeta entero. Tu perseguidor te encuentra. Parece asombrado. Ya no te sigue.
-790,000. Le regalas el fuego a la humanidad, eres el moderno Prometeo. Entiendes que la humanidad debería encargarse de su propia ciencia.Llegas a la conclusión de que puedes corregir todo si te detienes a ti mismo antes de que robes la máquina del tiempo. Viajas.
Omar Velasco Oria