No te peines en la cama
que si en la cama te peinas
los barcos, niña, los barcos
al puerto nunca se llegan.
Mejor a la madrugada
ponte rosas en las trenzas
y ve a pasear por la playa,
los blancos pies en la arena
Los pescadores te invitan
a dormir en sus esteras
a cambio de la merluza
y el bacalao de Noruega.
Los marineros te dicen
mil galanterías risueñas
y que, por cautivadora,
le ganas a las sirenas.
No te peines en la cama
que si en la cama te peinas
los barcos, niña, los barcos
perecen en la tormenta.
Santiago Idiart