…rareza poliplanetaria
donde desprogramas memorias,
nefastidad de computables colmillos,
juegas a las pesadillas
cuando el amor me aterra…
Agitancia billométrica con plecópteras electrotravesuras,
tu ingénito ojo retorcido estremece imágenes fenomenales.
Amante fotófaga, liberatriz de truculentaciones,
sudorancias neutrinas
y salivaciones
en la sombrura planetaria.
Ente descomunal, monstruosidad indecible,
atormentas mega sueños siderales.
¡Monstrua!
¡Monstrua intergaláctica!
Horripilante caricia estruendorosa de cósmico idioma.
Eres fétido candor para el terrícola viajero,
mil tentáculos selenitas lujuriando naves espanto.
Seduciéndome alunizar incontrolables lenguas monstruosas.
Aberración saturnina, programante amante teletransportadora,
atemporal gemido en escamosas curiosidades.
¡M-o-n-s-t-r-u-a!
¡Engendro macrodemencial!
Dictadora de satélites apócrifos
que destruyen sutiles atomicidades,
heliocéntrico vientre tu fulgor pulverizante
en el que esclavo soy al fin.
¡Implota! Vil deformidad en la garganta eterna.
¡Explota en bigbangs espaciales!
¡Monstrua intergaláctica!
…telegrafiemos con estrellas un amor descerebrado.
Víctor Orduña Silguero