Hace mucho tiempo en alguna reseña muy, muy lejana, alguien describía la primer película de la saga como un coctel de tramas de hechiceros, caballeros con espadas, western con pistolas, magia, princesas atípicas y naves espaciales. Y el resultado cambió la manera de hace cine hace cuarenta y dos años.
¿Y ahora? ¿Por dónde empiezo? Creo que con seriedad estará bien.
La «última» película de la «saga» mostró sus estertores ante el desconcierto de los fanáticos originales, la chunga de los agregados al fandom por las precuelas, y los morritos que se encantaron con las últimas dos secuelas.
Creo que para no contarte spoilers ficcionaré la construcción del guión. No te creas, si hay spoileres pero a estas alturas de la fenecida saga ya nada importa. Advertidos.
Ratón: Si no logramos el triunfo con esta batalla final se perderá todo por lo que hemos luchado.
Guionista 1: Esa frase está genial para la película.
Director: Estoy de acuerdo, la podemos repetir varias veces con efectos de flares en la pantalla.
R: No, idiotas, si esta película no funciona vamos a perder mucho dinero. Pero, bueno, la pueden meter en la película. Sírvanse de este pulque que me regalaron ahora que hicimos Coco.
D: Con flares.
R: Sí. La fórmula de Lucas funcionó genial y nos costó mucha lana, no quiero que le muevan mucho. Salud.
G: Podemos hacer lo mismo que se ha venido haciendo desde hace siete películas: Refritear todo. Salud.
R: Pero que no se note. Enlístalo.
D: El uso de la fuerza, las espadas láser, salud, los precipicios enormes, los mundos perdidos, criaturas exóticas, agujeros en la trama, la estrella de la muerte…
R: No, no, creo que la estrella de la muerte ya está muy sobada, piensen en otra cosa.
G: Personajes feministas, razas incluyentes, corrección política para aventar para arriba.
D: ¿No sería conveniente que aparecieran personajes ya muertos? Digo, tenemos los derechos, el pretexto de la fuerza, los modelos 3D y los efectos especiales.
R: Muy bien, sólo no traigan a la lagartija idiota aquella que salió en el episodio uno. Podríamos incluir algo gay.
D: Me parece muy arriesgado.
R: No fue pregunta. Soy Disney.
G: Anotado. ¿Cómo le hacemos para mantener el interés si apenas llevamos cinco minutos de película y hasta yo ya me estoy aburriendo?
R: Lluvia de ideas.
» Podemos hacer escenas supercortas, recuerden que el nivel de retención de la atención de los espectadores actuales ronda los tres minutos gracias a la inmediatez del internet, después de ese lapso se pierde. Bien. Escenas de menos de tres minutos mencionando cualquier idotez del universo expandido, que también tengo los derechos. Mundos, razas, artefactos, naves, personajes, ritos que jamás volveremos a mencionar. Pásate la lista de los reaparecidos. ¿Muertos? Sí, y vivos. Han, Leia, Yoda, Lando, Habba, La chinita, que no haga nada pero tú métela. Chuy, Arturito, Citripio, Jar jar no, Palpatin, las ganancias de las primeras películas. Dios te oiga. Pero ¿cómo vamos a revivir a Palpatin si se lo despacharon hace seis películas. No importa, no tienes que explicarlo todo. Caballos, quiero caballos. ¿Yoda bebé? Más adelante. ¿La estrella de la muerte? Qué no, pinche terco. No sé, sácate los destructores estelares machos, digo para equilibrar la cuota de género. Siempre los destructores eran hembras, ahora que sean bien machos. Que se note la fuerza fálico opresora del imperio heteronormado. Ok. ¿Le podemos montar un Zapata arriba? No abuses, creo que ese se murió en Rouge One. Lo revivimos también. No. ¿Cuánto llevamos? Treinta minutos. Más, más, necesito más. Como que los personajes no han evolucionado gran cosa desde que aparecieron. Evoluciónalos. Necesito más tiempo y diálogo. No, no, no, hay que vender juguetes, diálogos no. Algo más directo, estaba pensando en algo como Digimón o los pokemones, si no tenemos los derechos los conseguimos. ¿Que tengan una superfuerza mamalona? Sí, eso me gusta, la fuerza supermamalona. Y si esa fuerza mata a… no sé, al Chuy. Sí, mátalo para hacer tensión dramática. Que gacho. Dos escenas después lo regresas, vivo. No pasa nada, todo se tragan. Anotado. Mundos, viajes, más mundos. Necesitamos entrar a una estación del imperio. Hecho. Y robar algo, lo que sea. ¿Cómo qué? No sé, un mapita o algo así. ¿No tienen Waze? Es para hacerla de emoción, mira, esas dos pirámides del mercadito. Vamos bien, vamos bien. Necesito una escena donde remolquen una nave con cables. ¿Con cables? Sí, sí con cables en el espacio. Pero en la primera teníamos el rayo tractor de la estrella de la muerte. Duuuh, pero no tenemos estrellas de la muerte ¿recuerdas? Muy cierto, anotado. Más muertos, más muertos, quiero más muertos, ábrete la otra botella de Coco. Podemos matar a Leia. Hecho. A la chinita. Esa ya estaba muerta narrativamente, nunca hace nada, dale. Al Yoda. Ya se te adelantaron. ¿Qué más? Bar de mala muerte. Ponlo. Fiesta al final. Awebo. Beso incestuoso. Lo más que se acerque, y otro beso, preferentemente lésbico, que no se te olvide. Algo que se nos está pasando para «respetar el canon»: una relación desconocida entre los personajes. No sé, usa al Palpatin, para algo lo revivimos, ¿no? ¿Sí? ¿Que sea el hermano de Ray? Muy choteado. ¿Su padre? Me gusta pero ya se usó. ¿Su abuelo? Eso. Pero ya usamos el parentezco entre Vader y Kilo. Así se queda. Ya casi, ya casi, ayúdenme con el pulque de Coco. ¿Y si matamos a Rey? Mmmh, no sé, no sé. Pero que Kilo use su fuerza supermamalona para revivirla. Alovorgo, poder de sanación y todo el pedo. ¿Le gusta? Sí. ¿Le puedo poner flares? Sí. ¿Y si luego se muere el Kilo cuando revive a Rey y luego Rey lo revive a él y se muere ella? ¿Cuántas veces? No sé, unas tres cuatro. ¿Cuanto tiempo llevamos? Dos horas. No, ya casi acabamos, con una revivida tenemos. Además ya me está dando sueño esta madre. ¿El pulque? No, el guión. ¿Qué más, qué más? Que se muera el palpatin. Si awebo. Oigan, como que no hemos explicado porque demonios el episodio se llama como se llama. Ah, simón. Pues no sé, tal vez deberíamos volver al origen. Eso lo debimos hacer hace ocho cintas. Nunca hemos salido de ahí. Vamos al planetilla con varios soles ese. Ah, a Tatuin. ¿Y luego qué? Pos no sé. ¿Cuánto tiempo va? dos horas veinte. Pues, pues, que Rey se cambie el apellido y tan tan. Sí, me gusta, jefecito. Con flares. Seee, seee.
Los feliceto, ha sido una sección muy productiva. Una muerte digna a la saga. ¿Muerte? Ja. ¿Quién crees que tiene aquí el poder de sanación, el universo extendido, y un xingo de dólares (gracias a los fans fieles por decirlo amablemente) para revivir esta «saga»? Pues usted Ratón Palpatin. Exato. Así que ustedes no digan nada, podría contratar a Lucas para que finja que le revendemos los derechos y lo contratamos de, hic, director. Ganancias aseguradas. ¿O un reboot con flares? O una precuela de la precuela o una secuela de la secuela. Van aprendiendo, mis padawans, van aprendiendo.
Claro que todo eso salió de mi febril imaginación con esta gripe y tos de perro. Vayan a verla.
Espero sus comentarios. Amén de que no quiero ser de los pocos, éramos ocho personas en la sala, de los pocos que pagó por ese final tan glamuroso.
Feliz año nuevo.
Samuel Carvajal.
Aquí es donde vale una reseña. Lo importante no es cuanto quieras que te guste una película. Lo importante es saber si fríamente es un buen producto o no. Y sólo hace falta ser un escritor con oficio para saber que una obra está pésimamente escrita.
Me gustaLe gusta a 1 persona
No podría decir el momento exacto en que el concepto «refrito» se instaló de manera permanente en el cine. Las nuevas ideas son aplastadas ante el riesgo de desajustar una maquinaria finamente calibrada cuya función es hacer dinero. Desde que Mundo marino con Kevin Coster fracasó, la industria es mucho más escéptica al momento de dar entrada a un nuevo filme. // En cuanto a las sagas, no todas han sido igual de brillantes, pero muchas de ellas han muerto de pie con la intención de continuar con el éxito de aquellas que las precedieron. Caso de El padrino III en la que Andy García hace una sobreactuación dinámica para dar contrapeso a Al Pacino. Caso también de Hannibal/Dragón rojo en la que Ralph Fiennes y el «villano» de Norton ofrecen decencia en la segunda mientras que Julianne Moore, Gary Oldman y Ray Liotta muestran pulcritud en la primera, ambas con un Hopkins brillante. // Otras son el resultado de guionistas perezosos y actores que sólo saben actuar en uno o dos papeles: Rambo 1 2 3 4 5 Duro de matar 1 2 3 4 5 6 Rápido y furioso 1 2 3 4 5 6 7 8 9 // Otras son la afortunada culminación de una obra pasado o presente: el señor de los anillos (primeras tres) o Harry potter. // algunas muestran la avaricia de los productores por exprimir los bolsillos de los fanáticos: señor de los anillos (4 a 6) // Y los refritos que se venden como refritos y que no tienen un valor más allá que la mera distracción: Tiburón, King Kong, Godzilla. Chuky, Pesadilla en la calle del infierno, viernes 13 1 2 3 4 5 6 7 2000 // No sé si llamarle reciclaje a esa actitud de Disney de sacar una naranja de la basura tres años después de haberla tirado y volver a exprimirla. Luego tirarla y seis años después volver a sacarla y exprimirla. (Piratas del caribe va a durar hasta que Johnny Depp ande en bastón como el decrépito chavo del ocho) // Creo que la basura buena se puede reciclar si se hace con el oficio y el respeto que el arte merece: ¿cuántas veces se ha adaptado romeo y Julieta? ¿cuántas más Cumbres borrascosas?; Incluso los tres mosqueteros han sido una de las más repetidos lugares en la cinematografía. // Pero es muy diferente estar respaldados por un talento real que por una apropiación que ronda el plagio: Sergio Leone es tal vez el principal responsable de que la industria en Hollywood se fusile grandes películas o las reinterprete al antojo del director (o peor todavía; del público). De los siete samurái a los 7 magníficos y de éstos a bichos hay incapacidad creativa y la convicción de repetir la fórmula del vecino. De abre los ojos de Amenábar a Vanilla sky. Que The Departed ganara el oscar a mejor película, siendo una adaptación de una película extranjera (hong Kong) habla mucho de la valoración que le hace Hollywood a la creatividad // Muchas de los filmes de ciencia ficción cuentan con agujeros negros en la trama, pero realmente pocos agujeros negros tienen a una película en su interior. Ese es el caso del ascenso de Skywalker. // Es una película que hace culto al envase y al desperdicio: superficial, hueca e incapaz de ocultar el hedor del cadáver que ofrecen como estreno. Debería ser delito vender una entrada para ver una película a la que le han cambiado la etiqueta de caducidad: la gente sale intoxicada. Y debo mencionar que respeto a quien gusta de consumir comida chatarra, pero esta del Ascenso de Skywalker es un foco de infección que Sanidad debería atender.
Me gustaLe gusta a 1 persona