Llevando tu recuerdo a flor de piel
te dejé en libertad
y rehuí tu mirada,
te sepulté en mi olvido
para hacerte feliz
y cumplir tu deseo, que te olvidara;
quizá tú me olvidaste,
tal vez ya no recuerdes mis caricias
borradas de tu piel por otras nuevas,
yo, no voy a mentir,
no te he olvidado
me acostumbré a vivir con tu recuerdo
que me acompaña siempre,
como sombra en la sombra de tu olvido
Óscar Pedraza