El brutal despertar de mis pasiones
rompió el encanto en mi idolatrada,
quiero con ardor mis ilusiones,
volcarlas en la fuerza desatada.
En la pasión indómita me agito,
al deslumbrarme su carne nacarada,
con explosión, mi ser fiero me grita,
Es tuya, por fuerza desatada.
El torbellino me arroja en el incendio
que se vuelca en mis entrañas indomables,
sintiendo el dolor de mil puñales
clavarse con la fuerza desatada.
Y pierdo la noción de mi embelezo,
rompiéndose el hechizo de mis sueños
Quiero decirle: Amor, yo soy tu dueño
por el grito de la fuerza desatada.
Quiero tomarla en mis brazos, y agitado
hundirme en la pasión de muchos besos,
y gritarle: eres mía, solo mía,
en la emoción de la fuerza desatada.
Adán Azuara Espinoza